Murmurando la Torah

SALMO 1

1 ¡Cuán bienaventurado es el hombre que no anda en el consejo de los impíos, ni se detiene en el camino de los pecadores, ni se sienta en la silla de los escarnecedores, 2 sino que en la ley del SEÑOR está su deleite, y en su ley medita de día y de noche! 3 Será como árbol firmemente plantado junto a corrientes de agua, que da su fruto a su tiempo, y su hoja no se marchita; en todo lo que hace, prospera. 4 No así los impíos, que son como paja que se lleva el viento. 5 Por tanto, no se sostendrán los impíos en el juicio, ni los pecadores en la congregación de los justos. 6 Porque el SEÑOR conoce el camino de los justos, mas el camino de los impíos perecerá.

Hoy día es tan fácil distraernos. Si estas andando en las tiendas, o si estas de pie en la linea de la farmacia, o si estas sentado en tu sofa en la tarde, seguro que vas a ver a muchos con sus cabezas inclinadas y sus ojos pegados a una pantalla, su smart-phone. La tecnología es una distracción que robe nuestra atención y enfoque diario, y aun casi todo momento del día.  

Si estamos siempre pegados a facebook, pinterest, youtube, y twitter, nunca tendremos suficiente tiempo para meditar en la palabra de Dios. Por tanto, según este salmo, jamas seriamos los bienaventurados o dichosos. 

Jamas daremos fruto. Jamas prosperamos en el Espíritu. 

La advertencia de salmo es que si no meditas en Su palabra, estarás vacía de valor real como la paja que se lleva el viento. 

¿A que nos llama hacer? Murmurar en la Torah de día y de noche. 

En el hebreo original el verbo para ‘medita’ es ‘murmurar’, hablar entre dientes, y la palabra para “la ley’ es ‘Torah’

(Torah se refiere a los 5 libros de Moises, Genesis a Deuteronomio, y en general la instrucción de ellos). 

Por generaciones nuestros antepasados en la fe han hecho esto, desde los antiguos judíos hasta los reformadores cristianos. Han inclinado sus cabezas cuando andaban en las tiendas, o cuando estaban esperando en lineas, o cuando estaban sentados en las sillas de su casa. Pero en lugar de ver a una pantalla llena de información sin valor, se han deleitado en la palabra de Dios para sacar sabiduría y renovación de sus corrientes de agua como un árbol plantado a la orilla del rió. 

¿Donde esta tu mente y tus murmuraciones este día? No te entretengas hacia la muerte, sino medita en la palabra de Dios que se trata del Hombre verdaderamente dichoso que fue clavado a un árbol para que saques vida del corriente de su sangre derramada. 

AMEN 

 


 

Taylor Kern